DEFENSORÍA DEL PUEBLO
Nació hace 23 años en Rusia, pero es hijo de padres peruanos. En ese
país recibió su primer y único documento de identidad, pero éste solo reconocía
su nacimiento mas no le otorgaba la nacionalidad pues –según sus leyes– si los
padres no son rusos, el hijo tampoco lo era, pese a haber nacido en su
territorio.
Por lo tanto, era considerado un apátrida. Cuando
tenía ocho meses la madre decide retornar al Perú y logra que el consulado
peruano en Rusia le expida un salvoconducto para volver al Cusco junto con su
hijo. Lo logró.
Al llegar a la 'Ciudad Imperial', fue recibido por
sus abuelos, quienes le dan afecto y cuidan su educación. Durante ese tiempo,
la inscripción de su partida de nacimiento les fue negada bajo el argumento de
que un peruano nacido en el extranjero debe inscribirse en el consulado peruano
del país de nacimiento. ¿Qué solución le proponían? retornar a Rusia e
inscribir al niño donde le expidieron el salvoconducto. Es decir: en el
consulado.
Pese a todo, este joven culminó el colegio y obtuvo
una libreta militar por inscripción voluntaria. Al cumplir la mayoría de edad
continuó su vía crucis, pues no tenía partida de nacimiento que le permitiese obtener
su DNI. No podía transitar libremente por el temor a ser detenido por
indocumentado. Intentó estudiar en la universidad sin mayor éxito al no
acreditar su identidad. No conseguía trabajo.
Frente a ello, recurrió a la Defensoría del Pueblo
en Cusco que, con el apoyo del Programa de Identidad y Ciudadanía, logró que la
nueva jefatura del Reniec –cumpliendo su labor fundamental de promover el
derecho a la identidad– le entregara su DNI. Este hecho, sin precedentes,
permite solucionar otros casos similares donde el derecho a la identidad sea
reconocido como un derecho prioritario que permita ejercer otras prerrogativas
fundamentales.
Fecha:13/07/2012 Fuenete el Peruano
Fecha:13/07/2012 Fuenete el Peruano